Estadio 0 – Regional 0

Salida durísima a las instalaciones del El Cristo donde los visitantes cuajaron un encuentro muy serio aunque romo en ataque para finalmente llevarse un punto que les deja en la pomada.

Jornada matinal de domingo en El Cristo donde se presentaba un choque entre dos equipos que se respetan y conocen mucho desde el año pasado, que se desarrolló por cauces bastante conservadores por ambas partes sin que ninguno consiguiera desnivelar el marcador. Comenzaba el Estadio sorprendiendo con su planteamiento táctico, donde modificaba su sistema habitual para igualarlo al usualmente utilizado por el Grujoan, de modo que se producían duelos hombre a hombre en muchas zonas del campo. No sería, sin embargo, el encuentro más vistoso del mundo, ya que ambos conjuntos se respetaban profundamente y primaba el asegurar el marco propio sobre el asedio al rival. El Estadio, pese a mostrar un despliegue en el terreno de juego similar al del Grujoan, difiere mucho en su estilo sobre el del cuadro verdiblanco, apostando siempre por un ataque mucho más directo, optando por balones en largo para aprovechar la envergadura de su ariete para buscar segundas jugadas y acciones a balón parado donde son superiores físicamente y donde cuentan con un lanzador de categoría. Se defendió bien el Grujoan de estos ataques, y pese a conceder algunos saques de esquina, fueron perfectamente contrarrestados con el káiser Miguel al mando, y ninguno de ellos llegó a inquietar realmente la meta defendida por un inédito Carballo. Buscaría el Grujoan salir con el balón controlado y quizá encontrar algunos huecos a la contra, pero fueron también eficazmente abortados por una zaga contudente y con constantes faltas que nunca se producirían en zonas realmente peligrosas.

La tensión se mascaba en el ambiente cuando se llegó al tiempo intermedio, sin que ninguno de los dos equipos realizara un disparo entre los tres palos y sin que ninguno quisiera cometer un error que probablemente significaría una losa definitiva para sus intereses. La tónica del partido no sufrió cambios en el segundo acto, y las defensas seguían imponiéndose a los ataques, sin que el cansancio hiciera mella en ambos conjuntos. Resulta digno de reseñar el despliegue protagonizado por el omnipresente Manu, que firmó un encuentro de gran nivel y que sin lugar a dudas mantuvo a flote a su equipo sacando la escoba cada vez que se producía el más mínimo desequilibrio o error que pudiera poner en jaque la portería de Carballo; gran aportación la suya sin la cual quién sabe si los acontecimientos hubieran discurrido por otros derroteros, manteniendo en todo momento la cabeza fría sin cometer errores y con una disposición táctica absolutamente sobresaliente. Más espesos estuvieron los hombres creativos del Grujoan, que no encontraron el toque y los espacios durante la jornada dominical aunque realizaron un importante trabajo en labores defensivas, que es a fin de cuentas lo que se exige y con el que se ganan campeonatos.

Según pasaron los minutos ambos conjuntos realizaron las correspondientes sustituciones y modificaciones en la disposición de sus jugadores, con lo que el Estadio pretendió mostrar un perfil más agresivo y lanzarse a por el partido, pero fue un intento que a la postre resultó en vano, ya que no terminaron de encontrar la claridad en las ideas y los únicos acercamientos vinieron precedidos de errores propios del Grujoan que fueron inmediatamente solventados sin que la sangre llegara al río. El Guru, por su parte, trató de imprimir mas mordiente en su línea ofensiva, y el joven Christopher dispondría de algunos minutos donde se mostró participativo e incisivo, acompañado por los arranques de un recuperado Álvaro, que poco a poco comienza a mostrar su versión habitual de la temporada pasada. No se llegarían a concretar las buenas combinaciones, no obstante, en ocasiones de auténtico peligro, faltando siempre el último pase, el último desmarque, el ultimo disparo, y los minutos irían poco a poco consumiéndose sin que se reflejaran cambios en el electrónico. Empate sin goles finalmente, donde ambos equipos lograron su objetivo de dejar su puerta a cero, en el que primó el respeto que ambos se tienen y la prioridad de no permitir al rival sumar los tres puntos, en un encuentro que para el espectador probablemente no haya resultado muy atractivo pero que desde el punto de vista competitivo estuvo teñido de intensidad y concentración.

Una jornada más donde el Grujoan no es capaz de sumar su primera victoria, pero que no debe ni mucho menos desmoralizar al conjunto verdiblanco, ya que se ha demostrado una fortaleza y una fiabilidad defensiva, con el trabajo y el esfuerzo de todos y cada uno de los jugadores, que el año pasado seguramente no se hubiera desplegado y se habrían entregado los tres puntos al rival. El calendario ha resultado duro en los inicios de la competición, la pretemporada corta, y faltan aún muchas piezas por engranar que poco a poco deben ir encajando en su lugar. Además, los resultados de la jornada indican que esta temporada todos van a dejarse muchos puntos y la igualdad va a ser máxima, con lo que las espadas siguen en todo lo alto. Ahora el Grujoan disputará dos encuentros seguidos en su feudo, el cual debe ser un fortín que debe propiciar el despegue definitivo.