Marino de Cudillero 1 – Regional 1
Punto trabajadísimo de los verdiblancos que les permite seguir muy vivos en la lucha por los play-off pendientes de disputar otra nueva final el próximo fin de semana.
Jornada dominical soleada en el municipal de La Roja, unas instalaciones excepcionales y en perfecto estado de revista, donde dos de los gallitos de la categoría y que acudían ambos con buenas trayectorias medirían sus fuerzas en un choque que se preveía de altos vuelos, como finalmente fue. Comparecía el Grujoan con alguna que otra baja importante de última hora y con escasos efectivos en el banquillo en condiciones de prestar su concurso, con lo que la empresa se antojaba más complicada aún de lo esperado, a lo que hay que sumar algunos jugadores que se encontraban mermados físicamente por encontrarse en distintas fases de procesos víricos. No obstante, saldría muy bien plantado el Grujoan, bien cerrado atrás y tratando de sorprender a la contra con alguna acción fulgurante de sus veloces hombres ofensivos. El hiperactivo Miguelín sería un incordio constante para sus marcadores, tratando una y otra vez de aprovechar sus virtudes en el arte del dribling, encontrando esta vez un socio de categoría en el caudillo Mayo, que con su juego entre líneas obligaría a los locales a emplearse al borde del reglamento en diversas acciones. A los pocos minutos saltarían todas las alarmas en el banquillo visitante cuando el pétreo A. Ruiz sufriría un duro golpe en una disputa de la que saldría tocado y cuyas consecuencias arrastraría durante el resto del choque; no obstante, este hombre está fabricado con auténtico mármol de Carrara, y aguantaría estoicamente los 90 minutos del encuentro sin rechistar, consciente de lo mucho que se jugaba su equipo.
Sería sin embargo el joven Christopher el que protagonizaría la que sería sin lugar a dudas la jugada de la jornada pocos minutos después, en una contra en la que recibiría con espacio por banda izquierda y encararía a su par, rompiéndole literalmente en dos ocasiones con un doble recorte que hizo crujir la cintura de su marcador y definiendo con su zurda en un disparo cruzado, sutil y ajustado, que se colaría sin remisión pegado al palo izquierdo de la portería local. Acción de categoría del joven jugador verdiblanco, que siempre que tiene la oportunidad aporta de una u otra manera con su generoso esfuerzo y su calidad incuestionable.
Se pondría por delante el conjunto visitante con aún demasiados minutos por delante, conscientes de que quedaba mucho por pelear para sacar algo positivo de uno de los campos más complicados de la categoría y en donde casi todos los equipos punteros han mordido el polvo. Apretaría el Marino utilizando sus armas a la perfección, con su orden, entusiasmo y poderío físico, y el Grujoan no tuvo más remedio que defender lo conseguido con paciencia mientras trataba de encontrar alguna oportunidad al contragolpe. Dispondría de varias acciones a balón parado el conjunto local en saques de esquina y faltas laterales en las que los ovetenses despejaron el peligro a duras penas, hasta que finalmente encontraron su premio en un córner botado al segundo palo en el que el jugador local remató sin oposición ante la impotencia del mermado Carballo, subiendo la igualada al marcador. Duro golpe para los visitantes con mucho partido por delante, que parecía espolear a los cudillerenses, pero que no supuso una merma en la mentalidad del cuadro visitante, que se repuso del tanto con gallardía cortando perfectamente la hemorragia y sin conceder ninguna otra ocasión hasta el intermedio. Dura faena la que tenían este domingo los abnegados defensores del Grujoan, pero que fueron creciéndose con el transcurso de los minutos, con un imperial Domínguez que cada semana que pasa parece crecer varios centímetros y que se hizo un coloso en el juego aéreo, secundado por el pragmático Manu, sin olvidar del trabajo del siempre eficaz Sergio y del hoy sublime Luis, que cuajó un partido excepcional en todas las facetas del juego.
Se llegaría al tiempo de descanso con más problemas aún si cabe para el equipo visitante, ya que el joven y destacado Christopher comenzaría a sufrir los síntomas de un serio proceso gripal y padecería de mareos que obligarían a su sustitución en pocos minutos. Sin embargo, el Guru sacó una vez más fuerzas de flaqueza y cuajó unos 30 minutos impresionantes en la segunda mitad, mientras le duró la gasolina, probablemente de lo mejor de toda la temporada si tenemos en cuenta las circunstancias y el rival. El debutante como titular Prieto, que ya había cuajado una actuación destacable en la primera mitad en la zona ancha, comenzó a reinar en el centro del campo con su despliegue y su técnica, encontrando al talentoso Romario y consiguiendo conectar con un desatado Mayo, y ya se sabe que cuando estos dos jugadores se encuentran el Grujoan carbura, a lo que hay que sumar la aportación siempre valiosa y cargada de talento del mago de Pando, que sustituyó con honores a su compañero caído. Los locales se vieron obligados a detener al imparable Mayo con continuas faltas tácticas que quizá no fueron suficientemente castigadas en el aspecto disciplinario, pero que sin duda sembraron el pánico entre los de casa y además significaron algunos golpes francos cercanos y muy peligrosos a los que el Grujoan, como viene siendo la tónica habitual, no fue capaz de sacar partido. Cabe destacar también dos oportunidades de las que dispuso el heroico A. Ruiz con sendos disparos desde la frontal del área en los que una vez más reventó la bola pero no pudo encontrar portería, además de una acción individual del imprevisible Miguelín, esta vez por banda izquierda, en las que sorteó a cuantos rivales le salieron al paso y culminó con un tiro cruzado que se marchó fuera por poco.
Parecía que el Grujoan tenía el partido donde quería y se veía capaz de anotar un segundo gol que le colocaría en una posición muy favorable, pero los minutos fueron pasando sin conseguir el ansiado gol, y el cansancio comenzó a hacer mella en los ovetenses, en un terreno de juego de enormes dimensiones a lo que había que sumar la escasez de efectivos y la presencia de varios jugadores mermados, lo que hizo que el Marino, un excelente equipo, fuera estirándose paulatinamente y haciéndose con el control del juego. El partido se le hizo extremadamente largo a los verdiblancos, que bien pudieron irse de vacío en los instantes finales en un desenlace que podría haberse tildado de demasiado cruel, pero que por momentos pareció casi inevitable. El Marino se lanzó a por todas, cediendo muchos espacios atrás que al Grujoan le faltó fuelle para explotar, y disfrutaría de dos o tres claras ocasiones que la buena colocación de Carballo, el épico esfuerzo de los visitantes y el escaso acierto de los locales harían que se malograran y no subieran al luminoso, finalizándose con un valioso empate, que en términos generales debe considerarse justo y merecido.
Importante punto el conseguido por el Regional del Grujoan, no sólo por lo que supone seguir sumando, sino porque se deja atrás uno de lo desplazamientos más complicados que restaban por disputarse sin que el rival sume tres puntos y dejando las espadas en todo lo alto para lo que resta por venir, sin olvidar las especiales y difíciles circunstancias en las que se vio obligado a competir. Como nota mas negativa destacar la baja del goleador A. Ruiz para el siguiente choque liguero por acumulación de amonestaciones, frente al líder de la categoría, en un encuentro que se prevé como una buena oportunidad para asestar de una vez por todas un puñetazo encima de la mesa y afianzarse en la zona noble de la tabla. El trabajo impagable realizado por los jugadores que disputaron este encuentro, que se fajaron contra las adversidades como un auténtico equipo, permite que los verdiblancos tengan una nueva oportunidad de recortar distancias con los de arriba, lo que no es óbice para la reflexión y la autocrítica sobre los motivos que llevaron a la precaria situación en la que se jugó el encuentro.