Juvenil «A» 3 – Barcia 1
Victoria trabajada y merecida de los locales que recuperan las buenas sensaciones antes de visitar uno de los campos más complicados de la categoría.
Jornada dominical gris en el Luis Oliver en lo que a las condiciones climatológicas se refiere, pero muy soleada en cuanto a resultados, muy propicios para la parroquia local. En el partido estrella del día nuestro Juvenil “A” recibía al Barcia, un conjunto que aún no conocía la victoria pero que sin embargo daba muestras de su gran solidez cosechando empates ante algunos de los equipos más poderosos de la categoría, lo que auguraba un encuentro complicado que requeriría grandes dosis de paciencia por parte de los locales. En los compases iniciales el Grujoan trataría de imponer su ritmo y ganar metros poco a poco con su fútbol de toque, pero los visitantes no estarían por la labor de tolerar el juego local, por lo que, a pesar de que la posesión del esférico era dominada por los verdiblancos, se sucederían las jugadas verticales y los balones en largo, una suerte en la que el equipo valdesano se desenvuelve a la perfección con su férreo repliegue defensivo y sus salidas a la contra. Tras algunos tímidos acercamientos del Guru al área rival, una buena transición del Barcia que pudo ser mejor defendida significó el primer gol del partido, obra del cuadro visitante, en un balón remachado con suspense en el área pequeña de la meta defendida por un siempre acertado Diego Enrique, que sin embargo no pudo hacer nada en esta ocasión para evitarlo.
No obstante, cuando todo parecía apuntar a un desmoronamiento de los ánimos locales, y más teniendo en cuenta el duro varapalo encajado la semana anterior, el Grujoan se levantó con más fuerza que nunca, ofreciendo una muestra de gran madurez y liberándose finalmente de todos sus temores. Simbolizaría de manera muy especial la reacción verdiblanca el omnipresente Alex, que tras haber sufrido un fuerte golpe en la cabeza y perder la orientación durante unos instantes, regresaría de nuevo al terreno de juego para erigirse el baluarte defensivo que el Guru siempre necesita. La zona ancha de los locales comenzaría a carburar como cabía esperar, comandada por el mariscal Maxi que ejercería su liderazgo, apoyado en el solvente Abel, el todoterreno Carbajo, y especialmente, en el diferencial Isaías, cuya excepcional visión de juego propiciaría un pase al costado izquierdo donde el estilete J. Palicio ganaría la línea de fondo ganando en velocidad a su par, finalizando con un pase de la muerte que a punto estaría de remachar Carbajo, siendo finalmente la pausa de Josín la que igualaría el luminoso
definiendo con la elegancia característica de su pierna derecha. Excelente jugada la que trenzaron en esta ocasión los del Luis Oliver, que por fin parecían liberarse de los nervios y desplegar todo el fútbol que llevan dentro.
El tanto del empate espoleó más, si cabe, a los ovetenses, que continuaron con su dominio sin conceder ocasiones atrás, tratando de conseguir otro gol que les permitiera llegar con ventaja al intermedio. Sería en otro balón recuperado con gran trabajo en el centro del campo, el cual llegaría a los pies del violinista Isaías, que en tan solo medio segundo levantó la cabeza y filtró un pase milimétrico que recogería con ventaja el incansable J. Palicio, siendo derribado con dureza dentro del área visitante cuando ya se disponía a encarar el arco; una clara pena máxima que no dudó en señalar el colegiado, y que se encargaría de transformar con parsimonia el eficaz Maxi, logrando poner por delante a su equipo en un alarde de hombría del conjunto local.
Tras el tiempo de descanso el Grujoan decidió continuar con el control del encuentro sin exponerse en demasía en su zaga, desactivando las acometidas de los valdesanos con el concurso del exuberante Diego en el centro de la zaga, junto con el recuperado Alex, y de un sobrio Rubén, mientras que el joven Didi cuajaría otra gran actuación de nuevo ascendido con el primer equipo, echando el cerrojo por banda izquierda. No obstante, el Grujoan quizá pecaba un poco de conservadurismo, y si bien no pasaba apuros atrás, tampoco lograba acercamientos que le permitieran sentenciar la contienda, lo que siempre conlleva sus riesgos. Serviría de revulsivo para los locales la entrada del eléctrico Gabry, siempre un quebradero de cabeza indescifrable para sus rivales cuando dispone de espacios, que con su verticalidad pondría en más de un aprieto a los visitantes. Sería precisamente fruto de una de sus cabalgadas la jugada que propiciaría el gol de la tranquilidad para la parroquia local, después de que se llevase con potencia un balón dividido con su testa, condujera con precisión por el costado izquierdo sorteando a dos rivales, y cediendo finalmente con generosidad para que de nuevo el efecto Palicio se cobrase una nueva pieza con su golito de todos los días. Gran partido una vez más el suyo, con una actuación decisiva que sería fundamental en los tres goles verdiblancos.
El Barcia pareció bajar un poco los brazos tras el tercer tanto, mientras el Grujoan agotaría las sustituciones con hombres de refresco que con su energía colaborarían en el control del juego. Se produciría el debut con el primer equipo del joven y combativo Sergio, que como es habitual en él se fajaría sin descanso contra el centro de la defensa rival, teniendo su oportunidad también el gladiador Nelson y el disciplinado Miguel, que a pesar ambos de jugar en posiciones un tanto desconocidas, rayaron a buen nivel. Se llegaría sin más incidencias y sin sobresaltos al final del choque, logrando los locales una victoria muy seria que les permite seguir enganchados a las posiciones altas.
Balance positivo el que se puede extraer de esta jornada, en la que pese al mal partido de la semana anterior y las dificultades iniciales de éste, se pudo sacar con una solvencia no exenta de esfuerzo una victoria frente a un equipo muy serio que había cosechado algunos resultados interesantes. El próximo enfrentamiento del Grujoan será en el Nuevo Ganzábal frente al segundo clasificado, en un encuentro de altos vuelos en el que los ovetenses esperan por fin dar un puñetazo encima de la mesa y mostrar sus credenciales.
Mucho Guru!